Foto por BREITBART NOTICIAS
Si
bien es cierto que lo ocurrido en Miss Universo nos ha dejado un fastidioso
sinsabor, es aun más indignante que seamos agentes de odio y mostremos el cobre tan fácil, hay que
manifestar sensatez, de esa que habló y demostró nuestra maravillosa representante
de apenas 21 años, que desde entonces ha demostrado serenidad y aplomo. La equivocación
es responsabilidad del maestro
de ceremonias que ya ante cámaras acepto valientemente su culpa, un error que es difícil creer que ocurra en un evento tan prestigioso, pero que humanamente es posible. ¿Hace tan solo unas semanas no inundamos las
redes sociales condenando el blackface?, seamos coherentes y no hagamos mofa por un color de piel, nadie nos ha robado nada, no
existe un complot en contra por ser Colombianos y mucho menos es necesario recurrir a los
miserables y beligerantes memes de Pablo Escobar que sutilmente recuerdan
nuestra triste historia con las drogas y el narcotráfico, mencionar el Gol de
Yepes solo demuestra rencor y decir que
la fantástica chica de Filipinas no lo merecía, si que nos hace caer aun mas bajo.